Proyecto Taquile: Alumbrar las Noches con Energía Solar

Autor: Manfred Horn. Profesor Principal y Ex – Decano de la Fac. de Ciencias. Miembro del Centro de Energía Renovable. – (CER-UNI)

Publicado en 26/4/2000

La energía eléctrica es una parte imprescindible de la civilización moderna. Gracias a su uso en equipos electrónicos y la facilidad de transportarla y de transformarla eficientemente en otras formas de energía útil, por ejemplo, en energía luminosa. Sin embargo, casi la mitad de los peruanos todavía no disponen de la electricidad y seguramente millones de peruanos en áreas rurales remotas quedarán sin conexión a una red eléctrica inclusive dentro de diez o veinte años, debido al alto costo de la electrificación de áreas rurales. Frente a esta realidad particularmente en el Perú, ha aparecido en los últimos años la electrificación fotovoltaica como una alternativa de solución, debido a que la disponibilidad de la energía solar es en la mayor parte del territorio nacional, bastante alta y uniforme durante todo el año (5-6 Kwh m día). El Centro de Energías Renovables de la Universidad Nacional de Ingeniería, CER – UNI, se ha propuesto realizar un proyecto piloto de electrificación fotovoltaica rural para demostrar en el terreno la factibilidad técnica, económica y social de esta tecnología, incluyendo la verificación de las siguientes premisas:

Existe hoy en día una tecnología madura, todavía no muy difundida en el Perú, que permite satisfacer las necesidades básicas de electricidad de la población rural, mayormente, para fines de iluminación y de telecomunicaciones (teléfono, TV, radio).

Diversos proyectos en el Perú y en otros países en desarrollo demuestran que la tecnología fotovoltaica es fácilmente aceptada por la población rural, en mérito a la utilidad que representa.

Los gastos para iluminación (velas, kerosene para mecheros y lámparas de gas) y pilas y baterías para radios y TV, son para una amplia parte de la población rural mayores que el costo de la electricidad fotovoltaica que suministraría un mejor servicio.

La experiencia de otros lugares ha demostrado que no es conveniente instalar sistemas fotovoltaicos centralizado para una electrificación rural básica domiciliaria, sino se debe instalar en cada casa un Sistema Fotovoltaico Domiciliario (SFD) en forma individual e independiente.

Para el usuario que desea adquirir un SFD, es necesario que conozca previamente sus beneficios y costos.

Salvo casos excepcionales, la mayoría de la población rural del Perú no tiene la capacidad económica de paga un SFD al contado. Requiere de una financiación que le permita adquirir su SFD, con pagos a su alcance.

Es conveniente que una misma empresa se encargue de suministro, la instalación y del servicio de posventa de los SFD, incluyendo la capacitación de los usuarios.

Es posible hacer una electrificación rural básica en regiones remotas del Perú dentro del esquema vigente de economía de mercado, donde el usuario debe pagar el servicio que recibe.
Actualmente con financiación del Gobierno Peruano (Proyecto de Ahorro de Energía del Ministerio de Energía y Minas, PAE-MEM) el CER-UNI está ejecutando este proyecto piloto en la comunidad insular de Taquile en e Lago Titicaca.

EL PROYECTO TAQUILE

Taquile es una isla en el Lago Titicaca, a 3815 m s.n.m. Junto con la isla vecina, Amantaní, forman el distrito de Amantaní, que pertenece al departamento de Puno. Tiene una población de 1400 habitantes quechuahablantes (380 familias), dispersada sobre toda la isla de 5,7 km2. La actividad productiva principal en Taquile es l agricultura. Adicionalmente, todos los taquileños so artesanos, tejiendo los hombres con palitos y las mujeres con telares rústicos diferentes vestimentas y mantas con diseños muy típicos y de alta calidad. Los taquileños están siempre vestidos con sus trajes típicos, tejidos por ellos. La venta de esta artesanía lanar genera el principal ingreso “cash”. Algunos se dedican a la pesca en el lago, otros al transporte (lanchas) y últimamente se está fortaleciendo el turismo, atraído por la belleza del lugar y el estilo tradicional de vida y de vestimentas de los taquileños, que fomenta la aparición de restaurantes y alojamientos (todos rústicos). Mediante encuesta realizada entre 93 familias en Taquile se recogió información sobre los principales consumos energéticos, típicos para comunidades rurales andinas:

Para cocinar todos usan leña que obtienen en la misma isla (existen escasos árboles de eucalipto) y algunos usan kerosene, sobre todo en los restaurantes.
Para iluminación todos usan velas y lamparines de kerosene. En ocasiones especiales también usan lámparas de kerosene a presión, tipo Petromax. Todos usan linternas eléctricas con pilas.
Todos tienen un radio/tocacassette con pilas o conectados a una batería, el 70% tiene un pequeño televisor que recibe la señal de un canal nacional.
Según el testimonio de los encuestados, cada familia gasta mensualmente entre $4 y $20 en la compra de kerosene para iluminación, para pilas y recargas de baterías. Estos gastos justifican económicamente para una gran parte de la población de Taquile el uso de un SFD que les cuesta mensualmente una cantidad similar, pero que les ofrece un servicio mejor. Adicionalmente, es de esperar que la mejor iluminación permitirá aumentar las horas de trabajo en artesanía. Así, se tendrá indirectamente un efecto productivo, generando mayores ingresos.
Un estudio de prefactibilidad de electrificación de Taquile concluyó que la mejor y más barata alternativa era una electrificación fotovoltaica. Se consideró una necesidad familiar básica de 5 – 6 kWh/mes, lo que corresponde a un panel fotovoltaico de 50 W.
Por otro lado, la ubicación y las características de Taquile indican que la mejor, si no la única, alternativa para su desarrollo económico es el turismo ecológico y este puede aprovechar bien una energetización con energía solar, fotovoltaica como fototérmica.

En marzo de 1996, una comisión del CER-UNI explicó los alcances y la modalidad del proyecto a las autoridades de Taquile y realizó una encuesta. En dos días se inscribieron 92 taquileños, expresando su interés en la adquisición de un SFD, consiste básicamente de un panel fotovoltaico de 50 W, una batería de 100 Ah, un controlador electrónico de carga, tres fluorescentes compactos de 11 W. En mayo de 1996 se firmó con 75 personas de Taquile contratos de compraventa para SFD. Después la UNI realizó una licitación pública para la adquisición, instalación y servicio de posventa de 75 SFD. Las bases de la licitación precisaron con mucho detalle la configuración técnica de los SFD y de los servicios a adquirirse. La empresa ganadora, INTILUZ S.A., instaló los 75 SFD en 10 días, en julio de 1996, bajo la supervisión del CER-UNI, que previamente había evaluado en el laboratorio los componentes de los SFD ofrecidos. El Proyecto ha instalado también un Sistema Fotovoltaico Comunal (SFC) para fines sociales (educación, salud, etc.) y de promoción de la tecnología. Este SFC tiene un panel FV de 400 Wp, regulador de carga, 800 Ah/12V de batería, un inversor de 800 W de 12 VDC/220 VAC, 8 fluorescentes compactos de 20 W, un televisor a color, antena parabólica (3,5 m) y una videograbadora. El SFC está instalado en un local comunal y está bajo la responsabilidad (operación y mantenimiento) de las autoridades municipales.

COSTOS Y ASPECTOS FINANCIEROS

Sobre la base de los precios en Lima de los diferentes componentes de un SFD, se estimó que el costo de un SFD instalado en Taquile estaría entre US $800 – 900. En él están incluidos aproximadamente 40% de impuestos, 15% arancel y 18% IGV, (impuesto al valor agregado). Considerando lo anterior y las premisas del proyecto, se fijó los siguientes precios del SFD para el usuario, incluyendo la instalación y servicio de posventa:

al contado US $675.00
diferentes modalidades de pago a plazo US $700.00 – 750.00
con un mínimo de US $ 150 como cuota inicial, al momento de la instalación, y el resto a pagarse en un plazo máximo de 3 años.
La mayoría de los usuarios ha elegido la financiación más: cómoda: 5 cuotas de US $ 150 cada una, a pagarse en 3 años. Después de haberse instalado los primeros 75 SFD (financiados con fondos del proyecto), las primera: cuotas pagadas sumaban US $ 13500.
Por otro lado, como resultado de la licitación pública realizada, se ha obtenido los siguientes costos (incluyendo impuestos):

Un SFD, compuesto por las siguientes partes: 1 módulo FV Kyocera 51 Wp, 1 controlador de carga Steca 10 A, 1 batería 100 Ah Toyo Solar, 3 lámparas fluorescentes compactos 11 W/12V Helios, 1 caja de conexiones, cables, soporte del módulo FV,
Precio de venta de un SFD en Lima (incl. el impuesto): US $785.00

Transporte, instalación y servicio de posventa: US $65.00
Costo total de un SFD instalado: US $850.00

Isla Taquile- Lago Titicaca

PERSPECTIVAS DE SOSTENIBILIDAD

Para poder evaluar la sostenibilidad del esquema de electrificación rural con SFD previsto en el presente Proyecto, se puede considerar varios escenarios con diferentes indicadores de la sostenibilidad.

Sin embargo, una condición que se debe cumplir de todas maneras para obtener una sostenibilidad es que todos – o casi todos – los compradores de SFD paguen todas sus cuotas. Para lograr esto, es importante tener un eficiente y económico sistema de cobranzas de las cuotas. Se encargó la cobranza a una persona del lugar que recibe como pago un porcentaje de las cuotas cobradas (2%). Hasta la fecha no hay morosidad: todos ya han pagado por lo menos su segunda cuota. En las diferentes reuniones con los usuarios se ha enfatizado que los SFD siguen en propiedad del CER- UNI hasta su pago total y que la falta de pago conllevará un retiro de los sistemas. Como consecuencia de la instalación de los primeros 75 SFD en Julio de 1996 se ha creado una expectativa en la población de Taquile; muchos han expresado su voluntad de adquirir su SFD. En setiembre de 1996 se ha instalado otros 25 SFD, con el dinero recaudado con la primera cuota. Con los fondos de la segunda (ya pagada) y tercera cuota (julio 1997) se proyecta instalar en agosto de 1997 otros 40 SFD. Un escenario y una meta son que el Proyecto, que tiene un costo de US $ 100000 para el Gobierno (que incluye todos los costos de estudios y de asesoría realizados por el CER- UNI) permite, sin apoyo o subsidio adicional, una electrificación básica de todo Taquile. Con las cuotas de los usuarios se puede crear un fondo rotativo para instalar entre 300 – 550 SFD en un plazo que dependerá de la velocidad de pago. En el caso más lento (todos pagan 5 cuotas de $ 150 en 3 años), se puede instalar en aproximadamente 5 años un SFD a cada una de las familias de Taquile. Se obtendría así una electrificación de todas las casas y posteriormente de los locales comunales. (El primer Sistema Fotovoltaico Comunal (SFC), con un costo de $8000, fue pagado con fondos del proyecto). Considerando que el costo actual de un SFD es $850, en realidad el Gobierno recuperará toda su inversión inicial. Hoy, un año después de haberse iniciado el Proyecto, consideramos que esta meta será alcanzada. También consideramos que el logro de esta meta significará que el proyecto será exitoso, habiéndose demostrado que se puede lograr en el Perú una electrificación básica rural prácticamente con el esfuerzo exclusivo de los usuarios y usando empresas privadas para la difusión.